Fabricantes alemanes de juguetes de hojalata

Los juguetes de hojalata siempre han fascinado a niños y mayores. Fueron diseñados para seducir y despertar la sonrisa, con sus graciosos mecanismos, sus vivos colores y sus formas atractivas.

En origen, eran juguetes mayoritariamente económicos, sobre todo los de las firmas artesanales, pero con el tiempo se han convertido en objetos muy valiosos y, a veces, inaccesibles para el ciudadano medio debido al creciente interés de los coleccionistas e inversores, muy acusado desde los años sesenta.

Muchas han sido las empresas en el mundo que se han dedicado a fabricar unidades de metal / hojalata pero, sin duda, las mejores y más valoradas son las alemanas.

Destacan por la alta calidad de sus creaciones, capaces de aguantar años de juegos sin más daños que algunos descascarillados en la pintura, por sus innovaciones técnicas, su amor por el detalle, y su visión empresarial para preveer las demandas de los consumidores y adaptar sus artículos de exportación a las peculiaridades de cada mercado local.

Los primeros indicios de producción comercial en Alemania se remontan al siglo XVIII, pero no será hasta 1850 cuando el sector sufra una profunda transformación gracias a la mejora de la maquinaria y las comunicaciones ferroviarias.

Un cambio que provocará el progresivo abandono del trabajo en pequeños talleres familiares en favor de las nuevas factorías que, abastecidas con vapor o electricidad y organizadas por secciones y áreas, tenían capacidad de producir a gran escala y disponían de la tecnología y el presupuesto para acometer juguetes de gran complejidad.

Aspectos fundamentales que, unidos a la tradicional excelencia germana, hicieron que la industria juguetera alemana se convirtiera en una referencia a nivel mundial e inundara los mercados con trenes, automóviles, barcos, juguetes ópticos, vehículos a motor y todo tipo de figuras a cuerda, una posición privilegiada que sólo se vió comprometida tras los conflictos bélicos en Europa.

 En este post se recogen los nombres de los principales fabricantes alemanes de juguetes de metal, junto con una breve reseña de su historia:

– Bing, Gebrüder: Asentada en la ciudad de Nuremberg y fundada en 1863 por Ignaz y Adolf Bing, realizó juguetes de alta calidad, sobre todo linternas mágicas, optical toys, barcos, submarinos, coches y trenes, que marcó con la marca ‘G.N.B.’ hasta 1919 y posteriormente con la leyenda ‘B.W.’ (Bing Werke). Cerró sus puertas en 1934 no sin que antes la firma Bub comprara casi toda la producción. Sus trabajos son muy valorados por su solidez y la calidad de los materiales empleados en la realización. La empresa alcanzó un gran éxito en la época y sus productos, premiados con numerosos galardones en los certámenes internacionales, se vendían en todo el mundo.

– Bub, Karl: Fundada en Nuremberg en 1851, la compañía se dedicó principalmente a fabricar trenes, algunos a cuerda, y juguetes de hojalata. En 1933 adquirió parte de las líneas de producción de Bing y tras la Segunda Guerra Mundial trabajó junto con Tipp & Co. hasta 1967 cuando cerró la factoría.

– Carette: George Carette et Cie comenzó produciendo juguetes de metal y optical toys en Nuremberg en el año 1886 con tan sólo 24 años de edad y se encargó de suministrar material tanto a Bing, donde ejerció de aprendiz, como a Bassett-Lowke. Vivió años dorados entre 1905 y 1914 cuando abrió delegaciones en toda Europa pero la empresa se vió obligada a cerrar tras el estallido de la Primera Guerra Mundial y el exilio de su fundador a Francia, su país natal. Es un fabricante imprescindible y conocido en todo el mundo por la calidad y elegancia que transmiten sus juguetes que no vienen marcados.

– Distler, Johann. Ubicada en Nuremberg y fundada en 1900, se especializó en juguetes penny, coches y trenes. Fue adquirida por Trix y cesó su actividad en 1962.

– Doll & Cie. Peter Doll y J. Sondheim fundaron la empresa en Nuremberg en el año 1898 para fabricar máquinas de vapor y otros juguetes novedosos. En 1938 fue comprada por la compañía Gebrüder Fleischmann.

– Eberl, Hans. Afincada en Nuremberg, fabrica, desde su fundación en 1900, coches y juguetes originales. Sus creaciones vienen marcadas con la leyenda H. E. N. o un payaso dentro de un círculo con el sello Ebo Hui Hui u Oi Oi.

– Einfalt, Gerbrüder. George y Johann Einfalt fundaron la empresa en Nuremberg en 1922 para fabricar juguetes novedosos y vehículos terrestres.

– Elastolin. Fue creada en Neustadt en 1904 y se especializó en figuras de composición comercializadas con la marca ‘Elastolin’ grabada en la base. Cesó su producción en los años ochenta.

– Fischer, H. & CO. Asentada en Nuremberg desde 1908, fue constituida por Henry Fischer y fabricó una amplia variedad de juguetes de hojalata, incluidos coches y piezas como el Toonerville Trolley. Su distintivo era un pez aunque no se muestra en muchas ocasiones.

– Fleischmann, Gebrüder. Otra compañía afincada en Nuremberg y creada por Jean Fleischmann en 1887. Su actividad era muy variada aunque sobresalía en el campo de los barcos y juguetes flotantes y posteriormente los trenes.

– Günthermann. Siegried Günthermann creó en 1877 la empresa e instaló sus talleres en Nuremberg. Destacan sus coches, aviones y vehículos tirados por caballos y su amor por el detalle, con figuras muy cuidadas y equipadas con guantes o gafas en miniatura.

– Hausser, O & M: Asentada en las localidades de Ludwigsberg y Stuttgart, fue constituida en 1904 por Otto y Max Hausser que antes de esa fecha operaban con el nombre de Muller & Freyer. Se especializó en vehículos de hojalata de alta calidad, figuras de pasta y soldaditos, realizados con una sustancia denominada Elastolin, cuyo nombre sirvió de marca comercial y se muestra en la base.

– Heinrichsen, Ernst. Fundada en 1830 en Nuremberg, la compañía estaba especializada en la producción de soldados de metal. El hijo del fundador, Wilhelm, continuó la tradición familiar a partir de 1869 y la fábrica se mantuvo operativa hasta finales de la Segunda Guerra Mundial.

– Hess, Math. Creada en Nuremberg en 1826 por Mattheus Hess, fue una de las primeras empresas germanas en fabricar ferrocarriles a partir de acero prensado pero después realizó también coches de volante conocidos como Hessmobiles, que pueden identificarse por la manivela de arrastre que daba cuerda al mecanismo de fricción. Johann L. Hess heredó la compañía en 1866 y la producción cesó de manera definitiva en el año 1934.

– Heyde, Georg. Asentada en Dresde, la sociedad fabricó desde 1870 soldados de tipo sólido y semisólido, así como algunos fundidos con moldes huecos. Las cajas de sus juguetes se adornan con las medallas obtenidas en certámenes internacionales. Cerró sus puertas durante la Segunda Guerra Mundial.

– Hilpert. Operaba en las ciudades de Coburg y Nuremberg. Activa desde 1720 a 1822, las sucesivas generaciones de la familia fabricaron soldaditos planos marcados en sus bases con la letra H o con la leyenda ‘J. C. Hilpert’. Se piensa que la empresa fue una de las primeras del mundo en producir ejércitos de juguete con un gran número de figuras.

– Issmayer. Fundada en Nuremberg por Johann Andreas Issmayer fabricó desde 1861 juguetes novedosos y trenes.

– Lehmann. Constituida en Brandenburgo en 1881, trabajaba originalmente con latas y contenedores metálicos antes de dedicarse al sector de los juguetes de hojalata para niños, muchos con volante de inercia y todos claramente marcados. Los rusos se la apropiaron en el año 1949 pero fue restablecida en Nuremberg en 1951 y continuó produciendo juguetes. Es una de las marcas más conocidas y valoradas con un estilo extravagante y desenfadado que contrasta con la sobriedad de sus principales competidores. Sus productos no tenían la calidad ni el acabado de otras firmas pero, en cambio, eran muy alegres y vistosos, además de económicos en comparación con los de Bing o Carette. Se reconocen fácilmente porque vienen marcados con el nombre de la empresa y la patente.

– Lineol. Fundada en 1906 en Brandeburgo por Oskar Wiederholz, fabricó juguetes de hojalata durante un corto periodo de tiempo, 1934-1945, sobre todo vehículos tirados por caballos, soldaditos y vehículos militares, para cerrar sus puertas al final de la Segunda Guerra Mundial.

– Lutz, Ludwig. Asentada en la localidad de Ellwangen, estuvo abierta entre 1846 y 1891. Fabricó juguetes de hojalata de calidad, principalmente barcos, trenes y coches de caballos de cuerda, bajo esa denominación hasta el año 1857 cuando pasó a ser conocida como Englert & Lutz. Bing distribuyó sus productos hasta que finalmente fue vendida a Märklin.

– Märklin. Creada en Württemberg en 1859 por Theodor Friedrich Wilhelm Märklin, la empresa se denominó W. Märklin hasta 1888 cuando pasó a llamarse Gebrüder Märklin. El nombre volvió a variar en 1892 (Gebrüder Märklin & Co.) y, de nuevo, en 1907 (Gebrüder Märklin & Cie.). A comienzos de la década de los veinte se añade el sufijo ‘GmbH’. La fábrica, activa en la actualidad, siempre se ha caracterizado por producir unidades de hojalata de alta calidad y robustez y es considerada por los especialistas como el mayor fabricante de juguetes de la historia. Comenzó produciendo cocinitas para niños pero amplió su gama hasta cubrir un amplio abanico de juguetes como barcos, aviones y trenes. La mayoría de las unidades que salían de sus talleres estaban fabricadas a mano con gran detallismo y decoradas con motivos extravagantes como ruedas de recambio desmontables o correas de piel en las maletas.

– Moko: Es la marca del fabricante / comerciante de juguetes de hojalata Moses Kohnstam que poseía también la compañía de distribución del mismo nombre. Fue establecida en la ciudad de Fürth en torno al año 1875.

– Planck, Ernst. Fundada en Nuremberg. Originalmente, 1866, se dedicaba a la fabricación de linternas mágicas y juguetes ópticos y no sería hasta 1882 cuando comenzó a producir trenes eléctricos, vehículos terrestres y máquinas de vapor fijas y móviles. La fábrica cerró en la década de los treinta.

– Rock & Graner. Asentada en Biberach en el año 1813, la compañía se convirtió en torno a 1850 en la mayor fábrica de juguetes de hojalata, especializada principalmente en escenas, carruajes, trenes de cuerda y muebles para muñecas. Entre 1896 y 1904 se le conoció como Rock & Graner Nachfolger (R. & G. N.). Desapareció a principios de siglo.

– Schoenner, Jean. Fundada en 1875, la empresa es conocida sobre todo por sus trenes, locomotoras y barcos a vapor de gran escala, aunque también produjo juguetes de cuerda. Cesa su producción alrededor de 1904.

– Schreyer & Co (Shuco). Fundada en 1912 por Herr Schreyer y Heinrich Muller, comenzó sus actividades como fabricante de juguetes novedosos y muñecos blanditos, aunque en 1920 amplió su gama con juguetes metálicos forrados de felpa y equipados con mecanismos a cuerda que obtuvieron un gran éxito en el mercado nacional e internacional. Sigue operativa.

– Stock. Constituida en 1905 en la ciudad de Soligen por Walter Stock, fabricó juguetes de metal, entre ellos una gama de coches que imitaba el estilo de Lehmann, hasta el cese de la producción en los años treinta.

– Tipp & Co. Creada en Nuremberg en 1912 por Mrs. Tipp y Mr. Carstens, la compañía se convirtió en un prolífico fabricante de juguetes especializado principalmente en unidades de corte militar y coches de hojalata. En 1934, su propietario, Phillip Ullmann, huyó de la Alemania nazi y fundó Mettoy.

– Trix. Ubicada en Nuremberg, fabricó desde 1927 juegos de construcción y trenes eléctricos de un ancho de vía de 16,5 mm. En 1935 ya disponía de filial en el Reino Unido.

– Ueberlacker. Asentada en Nuremberg y fundada por Leonard Ueberlacker en 1871. La compañía se dedicaba principalmente a fabricar juguetes de hojalata aéreos y acuáticos.

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