Lámpara votiva, una ofrenda de luz perpetua

Lámpara votiva de orfebrería española en plata de ley de 925 milésimas

Este mes queremos mostraros una curiosa pieza cargada de simbolismo que destaca dentro de los ajuares litúrgicos y la platería religiosa por su singularidad y riqueza decorativa.

Las lámparas votivas, también llamadas de Santísimo, tienen una extensa historia y satisfacen una doble función, de culto y de ofrenda a una divinidad en agradecimiento o cumplimiento de una promesa.

La tradición dicta que estas luces de aceite, obra de plateros, orfebres y, en ocasiones, artesanos de distintas disciplinas, ardan e iluminen a perpetuidad el Santísimo Sacramento o la imagen venerada en las capillas y los altares de los templos para mantener viva la devoción de los fieles.

El uso de ofrendas votivas, depositadas en lugares sagrados por motivos rituales y para apaciguar a las fuerzas sobrenaturales, se remonta al Neolítico cuando se ofrecían a los dioses hachas, espadas y puntas de lanza.

Corona votiva  Fuente: Museo Arqueológico Nacional

Los principales dones dedicados a Dios o a los santos que recibían antiguamente las iglesias consistían en coronas votivas, muy relevantes en época visigoda, cruces votivas, que solían pender del centro de las coronas, y cálices votivos, grandes vasos trabajados con finura.

Será a partir del siglo IV cuando las primeras piezas de arcilla y vidrio, empleadas en los rituales sagrados y funerarios del cristianismo primitivo, alumbren la convulsa vida de las basílicas altomedievales.

Ya en las tumbas egipcias había lámparas que se entregaban a Anubis o servían para guiar el tránsito de los espíritus por la otra vida, lo que deriva en la acepción de llama eterna.

Detalle del casco acampanado y nervudo -gallones-de la unidad

Durante las tres centurias siguientes, se generaliza, tanto en Oriente como en Occidente, la manufactura de unidades acabadas en bronce y materiales preciosos (plata y oro) que se destinan a fines ceremoniales, fiestas solemnes y regalos de fe.

Suelen disponer de una a tres luces, seguir formas helenísticas, con recipiente cóncavo, ovalado o esférico, base alta y asas ornamentadas, y presentarse sobre muebles, pilares y pedestales o colgadas con cadenas desde las alturas de las edificaciones.

El progresivo enriquecimiento de la Iglesia, la ostentación y distinción de los fieles y el gusto por el ornato estimulan la gestación de ejemplares de increíble belleza que armonizan con elegancia arte, espiritualidad y funcionalidad

Lámparas votivas de factura atractiva, dotadas de ingeniosas soluciones técnicas y decoradas con primor, lujo y esmero para embellecer las majestuosas catedrales románicas, góticas y barrocas y los santuarios de culto más queridos.

Estos objetos, que también aparecen en homenajes militares y civiles en recuerdo de personas, lugares y hechos, acrecientan su difusión pero pierden carácter artesanal en torno al siglo XIX cuando el gremio de artículos litúrgicos sufre la transformación de la industrialización.

Vista de la perinola con la argolla

Los cambios estructurales con el consiguiente abaratamiento de los procesos productivos, la introducción de aleaciones y materiales económicos como el latón y la pérdida y destrucción de innumerables piezas votivas de plata antigua estimulan la demanda aunque a costa de una disminución generalizada de la calidad.

La desventaja para el coleccionista interesado en esta época en concreto es que estas referencias no siguen los parámetros del punzonado del metal precioso y resulta mucho más complejo datarlas, identificar al artífice y contextualizar el artículo.

Hoy en día, cuesta encontrar ejemplos en los museos nacionales de lámparas votivas pese a la larga tradición que este objeto tiene dentro de la orfebrería religiosa española, con centros importantes de producción como Córdoba, Granada y Madrid.

El ejemplar cuenta con tres cadenas y seis asas imitando notas musicales

Casi todas las que se muestran online son de las conocidas como de cadenilla y braserillo, una tipología habitual en la platería castellana desde principios del XVII que luego se adopta en otras regiones peninsulares.

Las hechuras de este modelo apenas sufren variaciones con los años y sólo se aumenta la profundidad del plato y se incorporan nuevos elementos ornamentales para mantener la versión actualizada y vigente hasta mediados del siglo XIX.

Tradicional lámpara votiva de cadenas y braserillo. Fuente: http://ceres.mcu.es

Estas lámparas de ofrenda solían acompañarse de un recipiente o caldero pequeño de cobre con asa de hierro, embellecido con rosetas, medias lunas, anagramas de María u otros motivos, que se colgaba debajo para recoger las gotas que rezumaran por efecto de la combustión

Caldero de cobre con asa. Fuente: http://ceres.mcu.es

Existen diversos motivos que explican el hecho que que solo conservemos una ínfima parte de las lámparas votivas gestadas en los talleres autóctonos.

Al ser la plata un metal valioso es objeto de rapiña en tiempos de guerra y además la gente tiene propensión a venderla y fundirla para conseguir liquidez en periodos de inestabilidad política y territorial y en caso de necesidades económicas urgentes.

Igualmente, las piezas antiguas pueden emplearse para hacer nuevos artículos o pueden ser destruidas y desaparecer durante los obligados traslados.

Diversos factores que han provocado la irreparable pérdida de lámparas históricas de gran valor, de las que en algunos casos se conservan imágenes o fotografías.

La que os presentamos en estas páginas no es tan antigua.

Se fabricó por encargo, en torno a los años cincuenta, siguiendo los modelos clásicos de la platería española.

El borde del plato está realzado con cincelados y crestería calada

Mide 74 centímetros de alto por 40 de diámetro y tiene un peso cercano a los dos kilogramos.

Luce los punzones oficiales que verifican la calidad del material precioso -925 milésimas-y adopta elementos decorativos a base de conchas, medallones, hojas, volutas y motivos geométricos y vegetales.

Detalle de los punzones oficiales españoles

Presenta un plato de planta circular con borde realzado con cincelados y crestería calada de inspiración medieval, base en dos cuerpos decrecientes rematada por perinola -nudo periforme-con argolla final lisa para borlón textil y seis asas adheridas que asemejan notas musicales.

De ellas parten cadenas caladas de eslabones y rosetas que confluyen en el casco (copete), acampanado y decorado con gallones, en el que enganchan las cadenitas que sostienen la arandela que sujeta el velón o el vaso de cristal con aceite que sirve de combustión a la llama.

Las cadenitas que parten del casco sostienen la arandela que sujeta el velón

Un excelente ejemplo de lámpara votiva de plata de ley española de la que os dejamos el enlace a nuestra tienda por si estáis interesados en su adquisición:

https://www.elcoleccionistaeclectico.com/lampara-votiva-orfebreria-1950-plata-ley

Esta tipología de artículos ha ido perdiendo su función original debido a la actualización de los sistemas de iluminación y la progresiva electrificación de los templos, pasando a desempeñar un papel más ornamental en las capillas.

Sin embargo, la demanda de lámparas votivas y de Santísimo aún se mantiene y en la actualidad existen diversas tiendas de artículos religiosos que comercializan unidades modernas en metales chapados, de techo, pie y pared, mientras que las antiguas son muy valoradas y apreciadas entre los coleccionistas.

Lámpara votiva rusa de 1890. Fuente: The Hermitage Museum

Estas últimas pueden incorporar apliques a la manera de candeleros, combinar materiales en su fabricación, presentarse con baños de oro al mercurio y embellecerse con ornamentos de querubines y cruces, esmaltes de colores, filigranas o bolas en las cadenas.

Se fabricaron en diversos países del mundo desde Rusia hasta Perú y la variedad cultural hace que aparezcan modelos muy simples y esquemáticos junto a piezas de exquisita elaboración y notable riqueza decorativa, con ejemplos procedentes de Méjico, España y otros países iberoamericanos y europeos.

Deseamos que os haya resultado atractivo este breve artículo dirigido a contextualizar la lámpara votiva que os ofrecemos en nuestro catálogo online y a conocer algunas de las singularidades de este peculiar y atractivo objeto de platería y orfebrería religiosa.

Como siempre cualquier sugerencia o aportación es bienvenida.

Nos vemos en octubre.

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